¿Es tu negocio accesible para todo tipo de públicos?
Si te lanzas a un nuevo proyecto comercial, es muy posible que ni siquiera te hayas planteado la pregunta en el título de nuestro artículo.
Si llevas tiempo en el mundo del emprendimiento, sabrás que no solo es muy importante para la reputación de tu negocio, sino que además es una obligación legal, y desde luego, moral.
El 15% de la población en nuestro planeta vive con algún tipo de discapacidad.
Si tu negocio no está adecuadamente adaptado a las necesidades de los consumidores con discapacidades, estás negándote un 15% más ingresos.
Y, no, no se trata solo de facturar más.
Se trata de cumplir la legislación y, sobre todo, se trata de ser solidario.
Pero, vayamos por partes.
¿Qué dicta la legislación sobre la accesibilidad en espacios comerciales?
Para determinar qué dice la ley sobre las condiciones de accesibilidad de todo tipo de edificaciones, incluidos los locales comerciales, debemos recurrir al Documento Básico de Seguridad de Utilización y Accesibilidad (DB SUA) del Código Técnico de la Edificación en su sección 9 y sus documentos de apoyo.
Si tu comercio está ubicado en una edificación ya existente y cuenta con licencia, esta ley dicta que, si vas a realizar obras, debes cumplir también la Ley 8/2013 de rehabilitación, regeneración y renovación urbana para conseguir la accesibilidad universal a sus espacios.
Si te lanzas al mundo empresarial por primera vez, vas a tener que demostrar que tus espacios físicos presentan unas condiciones mínimas de accesibilidad para conseguir la Licencia de Apertura Municipal.
Es decir, que desde un punto de vista legal, o bien en tus inicios, o bien cuando ya estés en funcionamiento, vas a tener que adherirte a la normativa y facilitar el acceso para tus clientes con movilidad reducida.
Sin embargo, como comentábamos en la introducción, todo el peso no recae en la ley.
Las consideraciones económicas y morales son también importantes.
¿Qué beneficios tiene un negocio accesible?
Tristemente, no se suele pensar en la capacidad que la persona con discapacidad tiene como consumidor.
Y eso, es un gran error.
La persona de movilidad reducida tiene las mismas necesidades, intereses y pasiones que el resto del público, y consumen los mismos productos y servicios que los demás.
Sin embargo, para consumir en igualdad de condiciones en un espacio físico (¡e incluso digital!), los espacios por los que las personas con discapacidades se desplazan deben cumplir toda una serie de condiciones básicas, desde no tener obstáculos que dificulten su desplazamiento, hasta contar con un etiquetado accesible.
Si se demuestra un esfuerzo por parte del comercio para facilitar la experiencia del consumidor con una discapacidad, esa persona lo agradecerá, y es muy probable que no solo vuelva a comprar, sino que comparta el nombre de esa marca con sus círculos sociales.
Por el contrario, si no se demuestra ese esfuerzo es muy probable que esa persona vaya directa a las redes sociales y comparta con todos sus contactos lo difícil que ha sido su compra en ese comercio.
La accesibilidad de tu negocio pesa muchísimo en tu reputación, no lo olvides.
¡Y en tu conciencia, sin lugar a duda!
Así que, si aún no has adaptado tu negocio para el cliente con discapacidades, ¡hoy es el día perfecto para empezar!
¿Cómo creas un negocio más accesible para tus clientes con discapacidades?
No, no temas.
Hacer que tu negocio sea mucho más accesible no tiene ni por qué complicarte la vida, ni por qué costarte gran parte de tu presupuesto…
Hoy en día, puedes encontrar soluciones estéticamente agradables a la vista, económicas, y que se adhieren a la normativa establecida.
De acuerdo, entonces, ¿por dónde empiezas?
Zonas de accesos
Tu negocio debe tener un mínimo de una entrada de uso público fácilmente localizable y accesible desde la vía pública.
¿Qué quiere decir esto?
Quiere decir que todos tus clientes y visitantes van a pasar por este único itinerario, se trate de personas con o sin discapacidad.
La única excepción a esta norma son los edificios de patrimonio histórico donde es compleja la creación de un único acceso, y se permite la existencia de un itinerario secundario.
Cualquier tipo de instrumento de acceso al edificio comercial debe ser también accesible (sistemas de interfono, de aviso, vídeos, etc.), deben tener un color contrastado al de la pared, y no pueden estar a una altura superior a los 1,20m.
Escaleras
¿Tienes una o varias escalera/s de acceso a tu local?
En ese caso, tienes una barrera arquitectónica muy difícil de solventar para las personas en silla de ruedas, bastones o con discapacidad.
La solución ideal, como hemos visto, es hacer que ese itinerario de entrada a tu negocio sea accesible a todos tus clientes, y la mejor manera de hacerlo, es instalando una solución salvaescaleras como las que te ofrecemos en Bidea.
¿Qué opciones tenemos disponibles?
Además de nuestras sillas salvaescaleras, diseñadas especialmente para facilitar el desplazamiento de las personas mayores y/o con discapacidades en su propio hogar, en Bidea contamos también con otras soluciones que se adaptan mejor al entorno comercial, entre ellas:
1. Las plataformas salvaescaleras
Diseñadas para que aquellas personas que se desplazan en silla de ruedas o que tienen dificultades para subir escalones y moverse con facilidad puedan solventar esa barrera arquitectónica sin necesidad de abandonar su silla de ruedas.
Las plataformas salvaescaleras son de muy fácil manejo, consumen muy poco, y pueden plegarse ocupando muy poco espacio y sin restar a la estética del edificio. Pueden instalarse tanto en espacios exteriores como en interiores con una mínima obra de adaptación muy económica.
2. Elevadores de corto recorrido
Ideal para comunidades de vecinos y comercios, los pequeños ascensores están diseñados para superar desniveles de hasta 3 metros.
Puertas y Pasillos
El ancho libre de las puertas de entrada de tu comercio debe ser de 80 cm o más, con un sistema de apertura preferiblemente automático.
La puerta en sí debe ser corredera o abatible, pero en caso de que sean de apertura manual no deben ser demasiado pesadas. En caso de ser de vidrio, deberás señalizar su existencia claramente con franjas horizontales o con un logotipo de color contrastado.
Algo muy importante: las zonas anterior y posterior a la puerta no deben estar en pendiente, y deben permitir un giro de 1,50 m de diámetro, que es la circunferencia que la persona que se desplaza en silla de ruedas necesita para poder dar una vuelta cómodamente.
Para que las personas con movilidad reducida circulen sin dificultad por los pasillos de tu negocio, estos deben tener un ancho de 1,20 m y una altura de 2,20m como mínimo. Y si el pasillo fuese muy largo, debe existir un espacio cada 10 m donde el usuario en silla de ruedas pueda hacer un giro de 360°.
Lógicamente, los pasillos, así como los pavimentos en nuestro comercio, deben estar libres de obstáculos, ser antideslizantes, homogéneos, y no presentar ningún tipo de bache o huecos entre las baldosas.
Estos son tus mínimos.
Vas a tener que habilitar muchas otras zonas de tu comercio, desde los mostradores, hasta las barras en tu bar o restaurante, los probadores, y muchos otros detalles.
Y sí, lo sabemos, a primera vista parece mucho y complejo, pero ¿sabes cuáles son las buenas noticias?
Las buenas noticias es que, con Bidea, siempre vas a tener a un equipo especializado en soluciones de accesibilidad y salvaescaleras siempre a tu lado, orientándote para que cumplas todos los requisitos legales de la manera más asequible, cómoda y estética.
¿Sigues teniendo alguna duda?
No dudes en llamarnos al 943 63 01 14 o escribirnos a info@bidea.es y estaremos encantados de resolvértelas.
Estamos para ayudar.