¿Cómo sé si necesito una silla salvaescaleras y cuál es la más adecuada a mis necesidades?

¿Sientes que los peldaños en casa se te hacen un mundo?

¿Limitas cada vez más tus salidas al exterior por no tener que lidiar con las escaleras del replano?

Cuando un peldaño se convierte en un problema, es hora de actuar.

¡No dejes que esa escalera restrinja tu libertad de movimiento!

¡No dejes de hacer lo que quieres y debes por miedo a caer o a pasar un mal trago!

Las soluciones salvaescaleras han sido diseñadas precisamente para que tú puedas seguir viviendo tu vida sin limitaciones ni miedos.

En este artículo te explicamos qué es una solución salvaescaleras y cómo encontrar la que mejor se ajuste a tus necesidades.

¿Qué es una solución salvaescaleras?

Como bien indica su nombre, una solución salvaescaleras es un dispositivo que te permite superar todas esas escaleras que ahora mismo dificultan tu movilidad por los motivos que sean.

Gracias a las muchas soluciones salvaescaleras disponibles en el mercado, la persona con movilidad reducida gana más autonomía tanto en su hogar, como en las zonas comunes de su edificio, como en espacios exteriores.

Normalmente, las soluciones salvaescaleras no exigen grandes reformas, y pueden ser fácilmente integradas en la arquitectura de todo tipo de espacios, tanto interiores como exteriores.

¿Qué tipo de soluciones salvaescaleras existen hoy?

Existen muchísimas soluciones salvaescaleras, y casi todas personalizables y adaptables a tus necesidades y preferencias personales, pero a muy grandes rasgos, solemos dividirlas en las siguientes categorías:

Sillas Salvaescaleras

Suelen instalarse en hogares particulares o residencias de ancianos para trasladar a la persona de una planta a otra.

No exigen ningún tipo de obra y provocan un impacto estructural mínimo, adaptándose a diferentes entornos interiores o exteriores y a todo tipo de tramos: rectos, curvos, con pendientes pronunciadas, etc.

Este tipo de solución salvaescaleras requiere que el usuario tenga la movilidad suficiente como para transferirse de silla a silla por sí solo.

Plataformas salvaescaleras

Un dispositivo más amplio que, a diferencia del anterior, no exige que la persona baje de la silla de ruedas en la que se mueve.

Las plataformas salvaescaleras ocupan poco espacio, suelen ser plegables, y se adaptan a todo tipo de configuraciones y a todo tipo de espacios, tanto interiores como exteriores, públicos, privados, rectos, curvos, etc., exigiendo muy pocas reformas.

Elevadores de corto recorrido

Ideales para salvar espacios de hasta 3 metros, los elevadores de corto recorrido se instalan fácilmente en viviendas privadas, locales comerciales, residencias de ancianos, e incluso espacios exteriores.

¡Y no creas que son excesivamente costosos!

El precio de este tipo de solución salvaescaleras es mucho más económico que el de los ascensores tradicionales, y consume también mucho menos que estos.

Entonces, ¿cómo escoges la solución salvaescaleras adecuada a tus necesidades?

Sugerimos que empieces analizando el entorno en el que te mueves.

¿Vas a precisar una solución salvaescaleras en el interior de tu hogar?

¿En la escalera comunitaria?

¿En exteriores? ¿Están expuestos a las inclemencias del tiempo?

¿Cómo son los espacios? ¿Hay tramos rectos? ¿Curvos? ¿Son amplios? ¿Reducidos?

El siguiente paso, una vez analizado el entorno, es hacerse una pregunta importante: ¿puede el usuario transferir a una silla salvaescaleras por su cuenta?

Si la respuesta es afirmativa, la solución lógica son las sillas salvaescaleras ya que, como hemos mencionado, están diseñadas para personas que no tienen problema en efectuar la transición de silla a silla por su cuenta.

Por otro lado, si la respuesta es negativa, y la persona no puede transferirse a la silla salvaescaleras por su cuenta, tendremos que buscar otra solución en forma de plataforma o elevador.

Otro elemento importante a tener en cuenta es tu presupuesto.

¿Cuánto puede cuesta instalar una solución salvaescaleras en el entorno en el que te mueves?

Si bien es cierto que la instalación de sistemas de accesibilidad tiene un coste muy asequible, es importante recordar que el precio final variará según toda una serie de factores que incluyen la altura y las dimensiones, si el tramo es recto o curvo, la distancia a recorrer, y el tipo de acabados que se escojan.

Algo también que debes tener muy presente es que, si te estás planteando instalar una solución salvaescaleras en un espacio comunitario, gran parte de los costes finales van a ser compartidos por los vecinos.

Si bien hasta ahora era imprescindible que la mayoría de los vecinos estuviesen dispuestos a correr con los gastos de la obra, la última reforma de la Ley de Propiedad Horizontal y la Ley 10/2014 y la 8/2013 establecen que todos los edificios (incluyendo las estructuras de carácter residencial) deberán ser accesibles o deberán mejorar sus condiciones de accesibilidad.

Esta nueva normativa no da margen para discusión: instalar soluciones de accesibilidad en las comunidades de vecinos es obligatorio y solidario.

Es decir, que, si uno de los vecinos vive con una discapacidad o es una persona mayor con dificultades para solventar las barreras arquitectónicas del edificio, y esa persona solicita la instalación de una solución de accesibilidad, la comunidad de vecinos está obligada a instalarla.

Y ¿quién acarrea con los gastos de la instalación?

Los propietarios del inmueble deberán compartir todos los costes de la instalación, “siempre que el importe repercutido anualmente de las obras o actuaciones, descontadas las subvenciones o ayudas públicas, no exceda de doce mensualidades ordinarias de gastos comunes”.

En otras palabras, todos los propietarios pagarán en función del coeficiente que se indique en la escritura de su propiedad o vivienda.

Te invitamos a que leas nuestro artículo anterior «Soluciones de accesibilidad para comunidades de propietarios: las preguntas que todos nos hacemos” en el que explicamos detenidamente todos los detalles pertinentes al coste de la instalación comunitaria de soluciones salvaescaleras, y las muchas ayudas y subvenciones gubernamentales que van a reducir el precio final de la instalación considerablemente.

Sin embargo, para que te hagas a la idea ahora mismo, el precio de una solución salvaescaleras ahora mismo oscila entre los 2.000€ y los 10.000€, dependiendo de los muchos factores que hemos enumerado en este artículo.

Te estamos hablando de precios orientativos que te ayudarán a tomar una decisión informada.

Lo ideal es que hables con uno de nuestros profesionales.

Nuestros técnicos expertos en accesibilidad realizarán un estudio detallado de tu espacio y de tus necesidades de accesibilidad y valorarán tus circunstancias sin ningún tipo de compromiso.

Ellos te ayudarán, en cuestión de minutos, a encontrar la opción que mejor se ajusta a tus necesidades y te elaborarán un presupuesto cerrado y sin compromiso.

Bidea siempre te apoya en cada paso del proceso de selección.

Llevamos casi veinte años dedicados exclusivamente a la adaptación de espacios interiores y exteriores para personas con movilidad reducida, y estamos 100% comprometidos a ayudarte a encontrar la solución salvaescaleras que mejor encaje con tu estilo de vida.

Así que, si crees que ha llegado el momento de dar el siguiente paso, concierta una cita con uno de nuestros técnicos en soluciones de accesibilidad. 

No tienes más que llamarnos al 943 63 01 14 o escribirnos en info@bidea.es. 

Estamos para ayudar.